Sínodo de la Sinodalidad: “Que sea la voluntad de Dios la que podamos discernir”
Prensa CEB 23.10.23.- Distintas voces se escuchan en el Aula Pablo VI del Vaticano durante la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que se realiza del 4 al 29 de octubre. Los representantes, delegados e invitados, pueblo de Dios que discierne a la luz del Espíritu Santo, comparten su testimonio deseando que la voluntad de Dios sea quien los ayude a discernir los caminos para una Iglesia en comunión, partición y misión.
La hermana Xiskya Valladares, una religiosa nicaragüense de la congregación Pureza de María, señaló que “en el Sínodo estamos viviendo la realidad del Espíritu Santo, donde sentimos verdaderamente la comunión, no solo con los que están presentes, sino también con los que están fuera orando por nosotros”. En este ambiente de fraternidad, la religiosa pide oraciones de toda la Iglesia: “Sigan pidiendo por este Sínodo, que realmente sea la voluntad de Dios la que podamos discernir”.
Por su parte, la representante de Bolivia, Dra. Erika Aldunate, manifestó que, tras recibir las charlas del padre Darío Vitali y el padre Timothy Radcliffe, se vio la importancia de participar en la Iglesia pueblo de Dios; Iglesia entendida como carismas, donde todos podemos trabajar la sinodalidad en la diversidad, entendiendo una eclesiología de comunión, en participación y misión.
El Presbítero Pedro Manuel Brassesco, Secretario General Adjunto del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (CELAM), considera que la tercera semana del Sínodo de la Sinodalidad “fue una experiencia realmente muy rica, de participación, de comunión; con la posibilidad de constatar la diversidad de la Iglesia que peregrina en todo el mundo, con sus diversas expresiones históricas y culturales, pero con una misma fe”.
“También esa fe y el Espíritu Santo es el que nos ha unido para poder discernir en conjunto cuales son los caminos que Dios nos propone para que podamos crecer en nuestra Iglesia, en comunión, participación y deseoso de ser fiel a la misión que se nos ha encomendado de anunciar el Evangelio”, dijo el P. Brassesco, a tiempo de asegurar que “el Sínodo no concluye aquí, sino que el proceso continua retomando lo que la Asamblea va a proponer como síntesis, después de escuchar lo que el pueblo de Dios quiere”.
Con un saludo a la Iglesia que peregrina en Bolivia, se despide confiando en las oraciones de toda la Iglesia y alienta a caminar unidos.
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