Iglesia cuestiona el retraso en la realización del Censo
Prensa CEB 17.06.2022.- Después de recibir de manos del Papa Francisco, el Palio Arzobispal en Roma, Mons. René Leigue Cesarí, Arzobispo Metropolitano de la Arquidiócesis de Santa Cruz de la Sierra, retornó a nuestro País. Hoy 17 de julio, presidió la misa dominical, y desde la Catedral cuestionó el retraso en la realización del Censo, algo que es prioritario y fundamental para nuestra sociedad y nuestro País. Así mismo señaló que las autoridades están mas pendientes de juzgar e investigar al otro, envés de buscar la unidad entre los bolivianos.
Cuando se habla del censo, se habla de los escaños que van a perder aquí, que van a haber más escaños al otro lado, yo me pregunto ¿de qué nos sirve elegir a más personas, más asambleístas, más diputados? sí solamente en campaña están presentes, en campaña van a los barrios y después cuando están en el poder ¿vuelven a sus barrios? ¿Vuelven a ver la realidad que viven?. Entonces creo que no es eso lo importante, lo importante es que sepamos cuántos somos, qué necesitamos, en qué realidad vivimos, en eso nos va a ayudar el censo, hay que esperar esto y tenemos que luchar eso porque de verdad eso es lo más importante hoy en día, yo veo eso y el Señor también hoy nos indica qué camino, hay que ver que es lo más necesario, lo que nos une, lo que podemos entre todos ponerle el hombro como decimos, lo que nos puede hacer vivir en unidad, lo que nos puede hacer vivir en paz inclusive, porque hoy en día hay grupos por ahí que otra vez se va a levantar momentos muy tensos, se va vivir momentos muy tensos, y eso no queremos, queremos vivir en paz y creo que si buscamos algo que nos une a todos vamos a vivir en paz, vamos a vivir en unidad.
Pidámosle al Señor, que podamos en medio de tantas cosas negativas, tantas cosas que tenemos, tantas necesidades que hay, que el Señor nos de sabiduría para poder encontrar algo que nos una a todos y que nos va a ayudar a todos.
El domingo 24 de julio a las 07:00 am, en la Catedral el nuncio Apostólico en Bolivia, Mons. Ángelo Accattino impondrá el Palio al Arzobispo de Santa Cruz, Mons. René Leigue, en la Catedral.
Homilía de Mons. René Leigue Cesarí, Arzobispo de Santa Cruz
17/07/2022
Muy buenos días a todos ustedes que están aquí presente, especialmente a los que nos siguen a través de los medios de comunicación, a los enfermos, los alejados, los que están en el campo y no siempre tienen misa cada domingo, los saludamos a todos ellos.
Las lecturas de hoy nos hablan de algo muy importante y que a lo mejor nosotros estamos olvidando un poco, la hospitalidad, la acogida, el estar atento al otro. Hemos escuchado la primera lectura de Abraham, un hombre preocupado de las cosas de su trabajo, pero también atento a los demás, él se queda sentado en la puerta observando un poco, cuando ve pasar a tres personas y les dice: Quédense en mi casa, yo los voy a atender muy bien, se ha preocupado de toda la atención de ellos y al final cuando estas personas parten, le dicen: tu esposa el próximo año tendrá un hijo, que importante la atención que tuvo Abraham con estas personas y al final esa buena noticia que recibe él. Ahora preguntémonos nosotros, si atendemos a las personas como debe ser, estamos atentos con ellos y a lo mejor no viene a la mente ¿Qué saco con atender a esta persona?, no tengo ninguna recompensa, pero no siempre esperemos la recompensa de las personas que hemos atendido.
La primera lectura nos dice: si nosotros estamos atentos con las personas, con los peregrinos, los pobres, los migrantes y de todas las personas que están a nuestro alrededor y que necesitan de nosotros, si hacemos algo por ellos, y no recibimos recompensa de estas personas, Dios no los va dar, y eso es lo que se manifiesta aquí. Las tres personas de la Santísima, Dios presente en la casa de Abraham y al final le dice; Tu esposa tendrá un hijo, el cual con tantas ansias esperaba no, el era avanzado en edad y que le llegue esa buena noticia y que al final sea Abraham el padre de muchos hijos, esa es una buena noticia para él. Eso es lo que hace Dios, esa es la presencia de Dios en cada una de las cosas que nosotros hacemos. La hospitalidad, el atender bien a las personas, eso tenemos que cuestionarnos hoy a nosotros, ¿Lo estamos haciendo? ¿Los hacemos con gusto? ¿Estamos atentos a estas personas que necesitan de nosotros? O la estamos dejando pasar, a lo mejor en esa persona está la presencia de Dios, como personas de fe, tenemos que cuestionarnos esto y a lo mejor estamos dejando pasar de largo, nos estamos olvidando, o estemos perdiendo ese gran valor que es, la atención y la hospitalidad.
Eso también escuchamos en el Evangelio, dos hermanas que estaban presente, Jesús llega a la casa, una de ellas lo atiende con mucho gusto, no Martha, pero luego Martha que hace, se preocupa de todas las cosas de la casa y María es la que queda con Jesús atendiéndolo y escuchándolo y dialogando con él, después Martha toma confianza con Jesús y le dice: no te importa que yo haga tantas cosas y que esté preocupada de todo y que mi hermana esté ahí sentada y no me esté ayudando, ¿Cuál es la respuesta de Jesús? Jesús le dice; Martha, Martha, tú preocupada por tantas cosas, sin embargo, tu hermana María ha hecho lo mejor hasta este momento, y ese momento que tenía ahí María era ese encuentro con Jesús, escucharlo, atenderlo, sin embargo, Martha estaba desperdiciando ese momento en hacer otras cosas, entones Jesús le dice; este es el momento, muy importante para tu hermana, como diciéndole a ella, tú también, no desperdicies este tiempo. La pregunta es también para nosotros ¿Será que están concentrados en este momento en lo que celebramos? O ¿será que están aquí en el templo y su mente está en otro lado, o están pensado en otra cosa? No será también la llamada de atención para nosotros hoy, para cada uno de ustedes, diciéndole, así como a Martha, están preocupados en tastas cosas, y estás perdiendo esta gran oportunidad, YO estoy aquí contigo, YO estoy aquí en medio de ustedes.
Entonces creo que esto tenemos que también pesarlo, reflexionarlo y meditarlo, a ver ¡cómo me encuentro con el Señor?, cuando estoy en la Misa ¿cómo me encuentro con Él?, ¿me concentro en lo que él me dice? Muchas veces pasa eso, salimos de la Misa y si me preguntan afuera ¿de qué trataba la lectura? ¿qué le dijo la lectura? Yo a veces opino solo: que bonita la lectura, pero ¿qué le dijo? ¿Alguna frase? Ah, yo no me acuerdo, entonces ¿qué significa esto? Que estamos aquí, pero nuestra mente está en otro lado.
El Señor hoy nos llama la atención, estamos perdiendo el tiempo, nos llama la atención en eso, aquí estamos para escucharle al Señor mediante la lectura y también después participar en el banquete que nos ofrece. Despejemos nuestra mente cuando vengamos aquí, saquemos tantas cosas que nos preocupan y concentrémonos en ese encuentro con el Señor, eso es lo que nos dice hoy, por eso le llama la atención a Martha, “preocupada en tantas cosas y estás perdiendo algo que es importante, María tu hermana escogió la mejor porque estaba escuchándole al Señor”
Hoy si vemos también nuestra realidad, a lo mejor también Jesús y esto es la palabra del Señor, que siempre va y nos dice algo, en cualquier realidad en que vivimos. Hoy en día hay tantas cosas que nos preocupan, pero entre esas a lo mejor hay algo que nos debe unir, que tenemos que llevar adelante. Por ejemplo, hoy en día hay un problema serio en nuestra sociedad, hablando del censo, ¿Acaso no es prioritario? ¿Acaso no es fundamental hoy en día en nuestra sociedad?, sin embargo, esto se está quedando como que a un lado y hay otras cosas que a lo mejor están poniendo como prioridad, como es esto de jugar a uno, llamar al otro, investigar a uno, al otro… ¿Eso será que nos interesa a todos? ¿será que es parte de lo fundamental hoy en día, lo necesario?
Entonces creo que esto también es lo que la palabra del Señor hoy nos dice: Preocupados de tantas cosas y están dejando algo que es fundamental que puede ser la unión de todos, todos pueden salir beneficiados de eso, sin embargo, estamos agarrando los gajos y no agarramos lo fundamental. La palabra del Señor siempre nos dice eso y nos llama a todos: Preocupados de tantas cosas, pero no de lo fundamental, no de aquello que le puede ayudar a todos.
Hoy en día hay tantas cosas que nos preocupan, pero habría que ver, habría que analizar qué es lo que realmente necesitamos todos, porque a lo mejor se está haciendo algo que solamente les interesa a algunos, no a todos, algunos grupitos también o personalmente pero no a toda una sociedad, no a todo un país que espera algo nuevo, algo diferente que nos pueda ayudar a todos.
El Señor nos dice: “Preocupados de tantas cosas, pero no de lo fundamental” Cuanto no quisiéramos que de verdad nuestras autoridades se preocupen realmente de nosotros. Creo que todos nosotros cuando hay elecciones, preocupados también eso a quién elegir y a lo mejor aquel que elige es porque ve a una persona que realmente puede ayudarle, sin embargo, cuando ya está en el poder se olvida de todo eso.
Cuando se habla del censo, se habla de los escaños que van a perder aquí, que van a haber más escaños al otro lado, yo me pregunto ¿de qué nos sirve elegir a más personas, más asambleístas, más diputados? si solamente en campaña están presentes, en campaña van a los barrios y después cuando están en el poder ¿vuelven a sus barrios? ¿Vuelven a ver la realidad que viven?
Entonces creo que no es eso lo importante, lo importante es que sepamos cuántos somos, qué necesitamos, en qué realidad vivimos, en eso nos va a ayudar el censo, hay que esperar esto y tenemos que luchar eso porque de verdad eso es lo más importante hoy en día, yo veo eso y el Señor también hoy nos indica qué camino, hay que ver que es lo más necesario, lo que nos une, lo que podemos entre todos ponerle el hombro como decimos, lo que nos puede hacer vivir en unidad, lo que nos puede hacer vivir en paz inclusive, porque hoy en día hay grupos por ahí que otra vez se va a levantar momentos muy tensos, se va vivir momentos muy tensos, y eso no queremos, queremos vivir en paz y creo que si buscamos algo que nos une a todos vamos a vivir en paz, vamos a vivir en unidad.
Pidámosle al Señor, que podamos en medio de tantas cosas negativas, tantas cosas que tenemos, tantas necesidades que hay, que el Señor nos de sabiduría para poder encontrar algo que nos una a todos y que nos va a ayudar a todos.
Esto lo es lo que el Señor le dice a Martha: “Preocupada de tantas cosas sin embargo están perdiendo algo que es importante, ese encuentro con El” El encuentro con el Señor también nos va a ayudar a nosotros para poder discenir las cosas que podemos hacer.
Cuando dejamos a Dios a un lado lo que prevalece son los intereses personales y de grupos, no de toda una sociedad, dejemos que Dios actúe, dejemos que Dios nos pueda guiar, de esa manera seguro es que vamos a encontrar unidad y la paz que tanto ansiamos. Que así sea.
Fuente: https://campanas.iglesiasantacruz.org/