Mons. Coter: La lógica de Dios es una lógica de amor y de misericordia
Prensa CEB 18.09.2022.- “El discípulo del Señor está llamado a ver las cosas de la vida con la lógica de la misericordia, que pone en primer lugar a las personas”, es la reflexión que realiza Mons. Eugenio Coter, Obispo del Vicariato de Pando y Administrador Apostólico del Vicariato de Reyes, a la luz del evangelio de Lucas, para este domingo.
Cuando se entiende que la lógica de Dios, es una lógica de amor y de misericordia, el llamado como discípulo del Señor es estar en las cosas de la vida con esta lógica de la misericordia, parece fácil, pero esta perspectiva abre el corazón y otra manera de mirar la realidad, señaló el obispo.
Monseñor habló de la lógica perversa del mundo, una lógica de comercio, una realidad en la que se encuentra el discípulo y donde está llamado a vivir con misericordia.
En la parábola, Jesús dice que el amo alabó al administrador por haber obrado hábilmente y no por deshonesto, sino que actúa de manera perspicaz. Con este ejemplo el discípulo tiene que obrar con esta perspicacia, esta lógica que no alaba la deshonestidad, sino alaba este esfuerzo de alcanzar de verdad y de invertir tus bienes para alcanzar lo que de verdad cuenta para ti y vale a los ojos de Dios.
El obispo, reflexionó sobre la actitud que se tiene en esta lógica de misericordia. El administrador “condona” la palabra “CON” que significa favorecer al otro, “DONAR” que significa dar.
Mons. Coter, puso el ejemplo del hombre que trabaja para cuidar a su familia y al final termina descuidándola, pidió cuidar las relaciones con las personas, “existe el riesgo de que el dinero te agarre el corazón y no cabe espacio para las personas y menos para Dios”, advirtió.
Reiteró que la lógica del dinero no es la lógica del cristiano, puso de ejemplo los incendios, la explotación de la tierra, todo esto que pasa por encima de las personas y frente a esta realidad exhortó. “Entrar en la lógica que pone en primer lugar al amor, a la misericordia, al condonar”, poner en primer plano a las personas para “vivir con dignidad y con amor”, finalizó.
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