Papa Francisco: El mundo en grave crisis desde hace 15 años
Prensa 23.09.2022.- Francisco recibe en audiencia a los miembros de Deloitte Global, una empresa de consultoría internacional. «Sean consultores integrales para cooperar en la reorientación del modo de ser de este Planeta, enfermo de clima y de desigualdades» es la invitación del Pontífice.
Salvatore Cernuzio – Ciudad del Vaticano
La gran recesión de 2007, la deuda pública, Covid, la guerra de Ucrania, las amenazas globales. Y mientras tanto: conflictos «crueles» en todo el mundo, la explosión de las migraciones, el cambio climático, la pobreza endémica porque, durante estos años, «mientras una parte de los hombres y las mujeres mejoraban su vida cotidiana, otra parte sufría elecciones sin escrúpulos, convirtiéndose en las principales víctimas de una especie de contra-desarrollo».
Es un análisis descarnado, tan descarnado como la realidad que el mundo se ha visto obligado a afrontar en los últimos quince años, el del Papa Francisco en su discurso a Deloitte Global, la consultora internacional con sede en Londres, cuyos miembros han sido recibidos esta mañana en el Palacio Apostólico. Sólo una representación de los aproximadamente 350.000 empleados que «en cada momento del día» trabajan para asesorar y ayudar a otras organizaciones. «¡Una gran responsabilidad!», observó Francisco, que les pidió que cumplan la precisa misión de ser «consultores integrales» para «cooperar en la reorientación del modo de ser de este Planeta nuestro, que hemos enfermado -nosotros, que hemos enfermado- en el clima y en la desigualdad».
Un mundo que sufre
«La humanidad está globalizada e interconectada, pero la pobreza, la injusticia y la desigualdad permanecen», comenzó el Pontífice en su discurso.
“En la actualidad, el mundo sufre un empeoramiento de las condiciones medioambientales; muchas poblaciones o grupos sociales viven de forma indigna en términos de alimentación, salud, educación y otros derechos básicos”.
Dejando huella
En este escenario, ¿cómo puede un consejero, un coordinador de consejeros, un profesional con experiencia «ayudar a revertir o al menos corregir el rumbo»? ¿Cómo pueden emprender su trabajo de manera que puedan caminar hacia un mundo más habitable, más justo y más fraternal?». Tres son las sugerencias del Papa.
La primera es la «conciencia de que se puede dejar huella», en virtud del «poder» de una empresa como Deloitte que puede «orientar las elecciones, influir en los criterios, evaluar las prioridades para las empresas, las universidades, los organismos supranacionales, los gobiernos nacionales y locales, y para los responsables políticos».
“Sus conocimientos, su experiencia, su pericia y la vasta red de sus relaciones constituyen un inmenso activo intangible que ayuda a empresarios, banqueros, gestores, administradores públicos a comprender el contexto, imaginar el futuro y tomar decisiones. Por lo tanto, ayuda a conocer para ayudar a decidir”.
Este poder debe ir constantemente acompañado de «la voluntad de orientar sus análisis y propuestas hacia opciones coherentes con el paradigma de la ecología integral», recomienda el Papa. Una pregunta ayuda a evaluar lo que funciona y lo que no: «¿Qué tipo de mundo queremos dejar a nuestros hijos y nietos?».