Inauguración Cátedra de Nazaria Ignacia
Prensa CEB 12.10.2022.- Con una Eucaristía se inauguró la Cátedra nacional de estudios académicos religiosos “Nazaria Ignacia”, un espacio de reflexión plural y participativo, de socialización en valores y principios católicos cristianos.
“Nazaria Ignacia”, fundadora de la Congregación Misioneras Cruzadas de la Iglesia MCI, es modelo de fe y evangelización, además la primera Santa de la Iglesia Católica boliviana.
La Eucaristía fue presidida por Mons. Cristóbal Bialasik, obispo de la Diócesis de Oruro, agradeció por la Cátedra, y por Nazaria Ignacia poniéndola como ejemplo de servicio.
Además compartió la historia de Nazaria, destacando su amor por la Iglesia, la entrega a los pobres, trayendo a la memoria las palabras que ella dijo: “Quiero levantar a Bolivia de su postración, no quiero solo pan para sus pobres, ni repartir limosnas que se recogen de la caridad, sino elevar la dignidad de este pueblo, enseñándole a trabajar, procurándole trabajo digno, haciéndole sentir que en las manos de todos, y de cada uno, está el participar de la belleza, de la armonía, la dulzura y la felicidad de sentirse hijo de Dios”.
Según compartió el obispo, Nazaria tenía un deseo grande de albergar a todos bajo el estandarte de la cruz, es así que fundó la congregación de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia MCI, por amor que le tenía la santa a la Iglesia.
Fue llamada «hija primeriza, tierna, legítima de la Iglesia boliviana». Mons. Cristóbal, asegura que este primer fruto abrirá el camino tantas otras almas. Y recordó las palabras de Nazaria Ignacia: “No hay que desanimarse ¡Adelante, siempre adelante!”.
Finalmente agradeció a Dios por Nazaria Ignacia y participó el deseo de que sea un ejemplo para muchos jóvenes.
NAZARIA IGNACIA MARCH MESA
NACIMIENTO Y LLEGADA A BOLIVIA
La Madre Nazaria Ignacia parte de una familia numerosa, nació el 10 de enero de 1889, en Madrid- España. Por motivos económicos, su familia tuvo que trasladarse a México. La primera vez que pudo escuchar la palabra “Oruro”, fue en el barco que transportó a su familia de España a México.
El día que Nazaria Ignacia realizó su primera comunión a los 9 años sintió el llamado de Dios, quién a través de una estampita, le dijo «Sígueme» y ella respondió «Te seguiré, Jesús, lo más cerca que pueda una humana criatura».
Según cuentan las religiosas de la comunidad de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia, que ella misma fundo, en el año 1920, llegó a Oruro, habiendo encontrado la infraestructura donde funcionaba el Beaterio de las Nazarenas, por el que sintió repugnancia interior y deseos de salir pronto, ante la miseria y abandono que observaba, momento en el que sintió que la imagen de Jesús Nazareno le decía: «Nazaria, tú serás fundadora y esta casa tu primer convento».
Posteriormente el 16 de junio de 1925, se realizó la fundación de la nueva Congregación, con un capital de 40 centavos entregados por la ex-abadesa de las Nazarenas, junto a diez jóvenes bolivianas de distintos lugares de Bolivia que fueron sus primeras compañeras, con ellas se inició las primeras obras misionales en las minas de Uncía entre otras; en el campo: Toledo, Condo, Challapata y Poopó.
Tras muchas obras de caridad y atención a los necesitados, la madre Nazaria, el 12 de febrero de 1927, recibió la noticia que se declaró erigida canónicamente la Congregación religiosa diocesana de las Hermanas Misioneras de la Cruzada Pontificia, «hija primeriza, tierna, legítima de la Iglesia boliviana», según había manifestado el Obispo, Monseñor Antezana.
Las «pontificias», atendían en Oruro a niñas abandonadas, visitaban a los presos, catequizaban en las parroquias y en los cuarteles, a la vez preparaban las visitas pastorales en las minas y en los campos.
SU LABOR
En la época de la fundación de la congregación, surgieron varios actos bélicos y económicos, entre ellos la Guerra del Chaco, época en la que la madre abrió la puerta de sus casas para acoger a los huérfanos de guerra y a la vez destinó a las religiosas a los campos de batalla para la atención de los caídos y heridos.
Asimismo la Madre Nazaria, en esa época, abrió el hospital de sangre en Potosí, donde las hermanas fueron para atender a los enfermos y asistir a los soldados, abrió internados para los huérfanos de guerra y posteriormente una casa en La Paz, para un noviciado, pero destinada finalmente para albergue de niños, esa infraestructura fue arrebatada por uno de los tantos gobiernos totalitarios de nuestro país.
Continuando con su deseo de ayudar a los necesitados, la Madre Nazaria Ignacia, abrió comedores populares, un acto de humanidad que mantienen las religiosas, quienes atienden a diario con almuerzo a muchas personas necesitadas.
En el trabajo son apoyadas por dos personas para la preparación del almuerzo y miembros de la pastoral juvenil, quienes colaboran en el comedor y atención a los comensales.
La manutención de toda la congregación se realiza con aportes de la población y lo que logran reunir en el bazar que realizan a fin de año, a pesar que tienen durante el año la colaboración de algunas instituciones, quienes aportan con víveres, ropa y recursos económicos para la atención y servicio que brindan a la población necesitada.
Su afán de apoyar a los pobres, la llevó a crear el Hogar de Pobres donde eran acogidos desamparados de avanzada edad, niñas paralíticas, personas dementes y ciegas que eran abandonadas, además de ancianas desamparadas y ciegas, que necesitaban toda clase de ayuda para seguir subsistiendo los cortos días que les quedaban en la tierra.
MUERTE
Si bien ella nació en España, vivió lo más importante de su vida y su misión en Oruro, donde ayudó a las mujeres, a los pobres y dedicó gran parte de su tiempo a la educación. Incluso cuando estuvo a punto de morir en Madrid, ya desahuciada insistió en retornar a Bolivia y tomó un barco en 3ra. clase, un viaje más de un mes y llegó a Buenos Aires, donde finalmente murió el 6 de Julio de 1943. Sin embargo, en 1972, sus hermanas decidieron trasladas sus restos a Oruro, como era el deseo de la Madre Nazaria Ignacia.
BEATIFICACIÓN
El 27 de septiembre de 1992 en Roma el papa Juan Pablo II firmaba el decreto de beatificación de la madre Nazaria Ignacia March. Su fiesta fue proclamada el 6 de julio de cada año.
CANONIZACIÓN
La hermana Cyntia Verónica Soto, de la Congregación. Soto explicó que el milagro por el cual se aprobó la canonización de la Beata Nazaria se produjo en Cochabamba.
Relató que una hermana tenía parálisis cerebral, al extremo de no reconocer a nadie, no hablaba y fue internada en el Hospital de Los Olivos. Sin embargo, se recuperó, y no había una respuesta científica para la evolución positiva de la religiosa. La única explicación fue que la fe logró ese milagro.
Además no se pueden dejar de mencionar los milagros que se atribuyen a la madre Nazaria Ignacia, como la curación de un enfermo instantáneamente o la resurrección de un muerto.
Hoy por hoy la congregación que fundo en Oruro se encuentra en cuatro Continentes: Europa, América Latina, África y Asia.
Fuentes consultadas
– A 24 años de la beatificación de Nazaria Ignacia March / La Patria, 28 de septiembre de 2016.
– La providencia y Nazaria Ignacia continúan velando por los pobres – De: Alicia Navía Mier / La Patria, 11 de julio de 2010.
– Santa Nazaria Ignacia March – De: Maurice Cazorla Murillo, El Fulgor de Oruro, 14 de octubre de 2018
– El papa Francisco canoniza a Nazaria Ignacia March, la primera santa boliviana – De: Jaqueline Vinoya Rocabado, El Fulgor de Oruro, 14 de octubre de 2018.
-Biografia de La Madre Nazaria Ignacia – Misioneras de la Cruzada Pontificia / Disponible en: http://www.misionerascruzadasdelaiglesia.net/Biografia,45
– Misioneras celebran decreto para canonizar a Nazaria / Kindare disponible en https://www.kandire.bo/7755-Misioneras-celebran-decreto…