La Conferencia Boliviana del Clero Diocesano inaugura su 36ª Asamblea en fraternidad, reflexión y compromiso por una Iglesia Sinodal
Prensa CEB 05.07.2023.- En la capital cafetera de Bolivia, Caranavi, se realizó el acto de inauguración de la XXXVI Asamblea de la Conferencia Boliviana del Clero Diocesano (CBCD), este 4 de julio. En la ocasión, las autoridades eclesiales hicieron hincapié en este encuentro, como un espacio de fraternidad, reflexión y compromiso para la consolidación de la Iglesia Sinodal.
Presencia que anima y nos fortalece
El obispo anfitrión de este encuentro, obispo de la Diócesis de Coroico, Mons. Carlos Huaygua, dio la bienvenida a los sacerdotes llegados de toda Bolivia a Caranavi: “es para nosotros una gran alegría acogerles y poder vivir estos días momentos de fraternidad, oración, estudio, diálogo, en los que compartimos las alegrías de la misión, las penas y proyectamos nuestro futuro para ser ministros de Dios en los lugares que nos toca vivir”.
Además, resaltó la importancia histórica de la Diócesis de Coroico, que está pronta a cumplir 40 años desde su establecimiento como Diócesis en 1983. Actualmente, esta jurisdicción cuenta con 36 sacerdotes diocesanos, oriundos de Yungas; 27 trabajando en la Diócesis, cuatro colaborando en Palos Blancos, en el Vicariato de Reyes, y dos sacerdotes en Italia y Perú; una muestra de colaboración desde la pobreza.
El obispo destacó la característica de producción agropecuaria de la Diócesis, principalmente en la producción de la hoja de Coca, lamentando que las parroquias de esta Iglesia local enfrentan los problemas de la droga y la explotación del oro, que dejan daños en la naturaleza y la contaminación de los ríos. Asimismo, recordó que uno de los problemas que atraviesa la población de Coroico es los escases de agua por sequía. Realidades que serán reflexionadas durante la Asamblea agradeció la presencia de los presbíteros “presencia nos anima y nos fortalece en la misión”, aseguró.
“El camino de la Sinodalidad, es el camino que Dios espera en la Iglesia del tercer milenio”
Por su parte, el encargado de negocios de la Nunciatura Apostólica de Bolivia, Padre Aghabious Gergis, dijo que esta Asamblea es un momento privilegiado e importante en la vida de la Iglesia, y, recordando las palabras del Papa Francisco en su discurso para el 50 aniversario del Sínodo de los obispos, señaló: “el camino de la Sinodalidad es el camino que Dios espera en la Iglesia del tercer milenio”, esto significa que todo el camino sinodal para los presbíteros es una misión de estar en medio del obispo y de todo el pueblo de Dios, “la misión de ofrecer a todo bautizado y feligrés, poder concretizar su bautismo, su ministerio sacerdotal común”. El padre Gergis invitó a los sacerdotes a reflexionar sobre la misión de presbíteros que puedan servir al pueblo de Dios y ayudarles a vivir este sacerdocio común y vivir la relación con los obispos, como claves para estar en espíritu de sinodalidad.
Sacerdotes que gastan la vida por el pueblo de Dios
En el saludo de inauguración, el presidente de la Conferencia Boliviana del Clero Diocesano, padre Fernando Carrillo, habló de la responsabilidad que tienen los sacerdotes de llevar insumos y fuerza al pueblo, que enfrenta diversas realidades sociales, económicas y con problemáticas que también son parte de la vida de la Iglesia.
“No podemos cerrar los ojos a la realidad, vivimos un ambiente difícil”, destacó a tiempo de alentar a afianzar la vocación de servicio, levantar la mirada y vivir el celibato sacerdotal de manera personal y como una gran familia. “Al terminar salgamos con la frente en alto, ser sacerdotes viviendo con humildad y gastando la vida por el pueblo de Dios, que se nos ha confiado”, dijo.
Los primeros en animar la consolidación de la Iglesia Sinodal
El monseñor Ricardo Centellas, arzobispo primado de Sucre y Vicepresidente de la Conferencia Episcopal Boliviana, saludó a nombre de los obispos a los sacerdotes diocesanos, manifestado la alegría que produce en encuentro.
El arzobispo recordó al clero diocesano que su principal carisma es el de la caridad pastoral, la donación de lo que son, “una actitud fundamental es donarse hacia los otros, no encerrarnos si no abrirnos y donar nuestra vida a la historia”, subrayó.
“Por esencia, sacerdotes diocesanos somos primeros llamados en animar la consolidación de la Iglesia Sinodal”, dijo alentando a los sacerdotes a “hacer y propiciar que la Iglesia viva la comunión y participación”.
Concluyendo el acto de Inauguración, la autoridad eclesial bendijo a los participantes, animándolos a renovar el espíritu de donación al estilo de Jesús.