Mons. Percy Galván da algunos consejos para practicar el perdón
Prensa CEB 18.09.2023.- Este domingo 17 de septiembre, desde la Catedral Nuestra Señora de La Paz, Mons. Percy Galván, arzobispo de la Arquidiócesis, realizó una distinción entre el perdón humano y el perdón divino. Dio algunos consejos para perdonar y subrayó los frutos del perdón.
Utilizando un papel bond, el arzobispo hizo una metáfora de la ofensa, que según explicó es similar a desdoblar una hoja de papel arrugada, “después de una ofensa o una calumnia, aunque las disculpas pueden alisar la hoja, aún quedan cicatrices y marcas de la ofensa”, este tipo de perdón, según explicó, no borra completamente los signos y los rasgos del daño infligido por las ofensas humanas.
El Mons. Galván dijo que solo el perdón divino restaura la situación original, donde no quedan rastros de la ofensa, el daño, la calumnia o la pelea. Utilizó la expresión «borrón y cuenta nueva» para ilustrar este tipo de perdón.
La autoridad eclesial dijo que el Sacramento del Matrimonio es un medio para adquirir el don del perdón divino y lamentó que muchos matrimonios desconozcan los beneficios de este sacramento en sus vidas.
Los frutos del perdón
El arzobispo Galván mencionó los frutos del perdón y cómo este acto beneficia a quienes perdonan y enumeró tres frutos principales:
1. Libertad: Destacó que el perdón libera a las personas de la esclavitud del odio, el rencor y el deseo de venganza, lo que les permite vivir una vida más plena y pacífica.
2. Restitución de Hijos de Dios: Argumentó que el perdón restituye la condición de hijos de Dios y hermanos entre todos, fomentando las relaciones familiares y fraternas.
3. Amar al estilo de Jesús: Mons. Galván afirmó que el perdón nos devuelve la capacidad de amar al estilo de Jesús, “no solo a aquellos que las aman, sino también a aquellos que les causan daño”.
“Que podamos perdonar, recibir el perdón de Dios y lógicamente gozar de los frutos de ese perdón: La libertad, la filiación divina, el amor fraternal y sobre todo queridos hermanos, que ese perdón haga a cada uno de nosotros encontrar la paz”, deseó el arzobispo.
Consejos para practicar el perdón
El Mons. Galván ofreció tres consejos para practicar el perdón:
1. Humildad: La humildad para reconocer que todos son beneficiarios del perdón de Dios y de sus semejantes.
2. Abrir nuestro corazón a Dios: Instó a abrir el corazón para permitir que Dios perdone a través de las personas y, así, alcanzar un perdón completo.
3. Dar el primer paso: El arzobispo animó a las personas a dar el primer paso “primerear” es decir, ser el primero en pedir perdón, sin esperar a que otros se acerquen a pedir perdón.