Obispos de Bolivia, Chile y Perú: En la piel del migrante y refugiado
Prensa CEB 24.06.24.- Finalizó en Tacna el IX Encuentro de Obispos de Triple Frontera con un mensaje de esperanza para los migrantes y aliento para quienes descubren en ellos el rostro sufriente de Cristo. El Papa los exhorta a comprometerse en la “lucha por una sociedad que les haga justicia y les respete su dignidad”.
Vatican News
El IX Encuentro de Obispos de Triple Frontera que tuvo lugar en la ciudad peruana de Tacna, del 18 al 21 de junio, concluyó con una declaración donde los obispos señalaron que «es sumamente importante involucrar a toda la Iglesia en un proceso de conciencia de la migración forzada, metiéndose en la piel del migrante y refugiado».
Francisco: No perder la esperanza
Decenas de agentes de pastoral —laicos, laicas, religiosas, religiosos, sacerdotes— junto a los obispos de frontera de Bolivia, Chile y Perú, abrieron los trabajos – reseña una nota de ADN Celam – con las palabras de aliento del Papa Francisco leídas por el obispo de Tacna, monseñor Marco Cortez Lara:
“Agradezco a mis hermanos obispos y agentes de pastoral que se preocupan por los migrantes. Los aliento a que no dejen de descubrir y enjugar en cada uno de ellos el rostro sufriente de Cristo sufriente, cada vez que se ven forzados a abandonar su tierra al no encontrar otra salida, enfrentándose a múltiples riesgos y tribulaciones de un camino duro y no siempre completado. Gracias por comprometerse con ellos en su lucha por una sociedad que les haga justicia y les respete su dignidad”.
En la misiva dirigida al obispo de Tacna, Francisco también dirige su pensamiento a todos los migrantes animándolos a “no perder nunca la esperanza por un porvenir mejor, y a poner su confianza en el Dios de la misericordia que no es indiferente ante el sufrimiento de sus hijos, antes bien, muestra siempre su preocupación, su cercanía y una profunda ternura”.
“Dios camina con su pueblo”
Este IX Encuentro de Triple Frontera tuvo como tema “Y, ¿Quién es mi prójimo? (Lc 10, 29), un interrogativo que, como explican los obispos en su declaración final, el Papa Francisco responde en su mensaje para la Jornada Mundial del migrante y refugiado 2024, “Dios camina con su Pueblo” al alentar a ver en los migrantes “el rostro de Cristo sufriente, cada vez que se ven forzados a abandonar su tierra por motivos económicos y socio políticos”.
En el contexto actual de la triple frontera, analizan los obispos, considerando el largo proceso de años de migración forzada, “somos testigos del desaliento de tantas personas, de grupos que regresan sin perspectivas, de mujeres solas con niños, de familias en gran precariedad”. La declaración, sin embargo, subraya que, a pesar de la colaboración efectiva entre las diócesis y los poderes públicos, la situación se presenta cada vez más desafiante: “urbanización precaria y la ‘toma’ de terrenos, la irregularidad y la criminalización de los migrantes y refugiados, el mercado irregular de ‘falsos tramitadores’, entre otros”
“En sintonía con el Papa Francisco que nos llama a caminar en espíritu de sinodalidad y comunión, buscamos estar a la escucha de los clamores de los migrantes que transitan por nuestros territorios”, se lee en el mensaje de los obispos.
Muy ‘prójimos’ a nosotros
“Reafirmamos, por lo tanto, nuestro apoyo al compromiso asumido desde hace 20 años y al esfuerzo que sigue siendo emprendido por los agentes pastorales, como ‘buenos samaritanos’, en su labor en el complejo campo de la movilidad humana. Agradecemos a Dios por la dedicación de colaboradores y voluntarios que actúan en tantas iniciativas para el bien de las personas migrantes y refugiados. De hecho, como lo reconoce el Cardenal Michael Czerny, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, nuestro horizonte es generar la cultura del encuentro en ‘las casas de acogida y centros de atención en las tres fronteras’, y ‘es sumamente importante involucrar a toda la Iglesia en un proceso de conciencia de la migración forzada, metiéndose en la piel del migrante y refugiado’”, expresan los obispos en la declaración final.
Bolivia, sede del próximo encuentro
Este año, el IX Encuentro de Triple Frontera tuvo como invitados especiales a monseñor Lizardo Estrada Herrera OSA, secretario general del CELAM y auxiliar Cuzco y a monseñor Jaime Villarroel, presidente de la Comisión Episcopal de Movilidad Humana (Venezuela). Los obispos de frontera que participaron en el evento fueron: monseñor Marco Antonio Cortez Lara, Tacna y Montegua; monseñor Ignacio Ducasse Medina, arquidiócesis Antofagasta (Chile); monseñor Moisés Atisha Contreras, San Marcos de Arica (Chile); monseñor Tomás Carrasco Cortez, Calama (Chile); monseñor Cristóbal Bialasik SVD, Oruro (Bolivia); monseñor Juan Carlos Asqui Pilco, auxiliar de Tacna y Monquegua y administrador apostólico Prelatura Chuquibamba (Perú); monseñor Jorge Carrión Pavlich, Puno (Perú).
El próximo Encuentro de Obispos de Triple Frontera se realizará en el año 2026 en Bolivia.
Fuente: https://www.vaticannews.va/