Mons. Leigue: «Revístanse de una persona nueva»
Prensa CEB 07.08.24.- Homilía de Mons. René Leigue Cesari, Arzobispo de Santa Cruz de la Sierra – Bolivia, Tedeum Ecuménico por Bolivia, desde la Catedral de San Lorenzo Mártir, el 6 de agosto de 2024.
Celebración y Reflexión
«Qué lindo es celebrar un aniversario más de nuestra querida Bolivia”
Un cordial saludo a las autoridades presentes y a todos ustedes, ciudadanos de nuestra patria Bolivia. Qué lindo es celebrar un aniversario más de nuestra querida Bolivia, ciento noventa y nueve años de independencia, libertad, lucha y tantas cosas que se han hecho por sacar adelante a nuestra querida Bolivia. Hoy estamos celebrando y recordando un aniversario más.
Esperanza y Compromiso
«Seguir luchando por esta Bolivia que tanto queremos”
Porque se trata de celebrar, sería de festejar algo nuevo, algo que nos llene, algo que nos ilusione, algo que de verdad nos haga avanzar. Pero creo que eso es lo que falta en este tiempo, en estos días. Parece que solamente recordamos esta fecha y, al recordarla, tenemos ese anhelo de salir adelante. Esa es la
esperanza que tenemos y, tal vez, el compromiso con el cual deberíamos hoy retornar a nuestros lugares de actividad, para seguir luchando por esta Bolivia que tanto queremos y a la cual pertenecemos.
El Buen Pastor
«El buen pastor da su vida por las ovejas y no así el asalariado”
Permítanme hacer una reflexión a la luz de la palabra de Dios, viendo un poco la realidad que vivimos. Ya me escucharon, en el Evangelio Jesús dice: «Yo soy el buen pastor, el buen pastor da su vida por las ovejas, el buen pastor lucha por sus ovejas, el buen pastor está en medio de sus ovejas. El buen pastor está con ellas en el momento difícil. El buen pastor acompaña», o como dice el Papa, «el buen pastor está adelante para guiar, está en medio para poder ver a todas y está atrás para que nadie se quede atrás». Que avancen. Jesús dice: «Yo soy el buen pastor, el buen pastor da la vida y no así el asalariado, que no es el pastor ni las ovejas son suyas; por lo tanto, el asalariado, cuando ve venir al lobo, huye abandonando las ovejas, y el lobo las agarra y las dispersa.»
Ilusión y Realidad en la Política
«¿Cuántas veces hemos escuchado esa frase? Que hay que gobernar escuchando al pueblo.»
Bolivia, en estos ciento noventa y nueve años, cuando hay elecciones generales, nacionales, creo que todos nos ilusionamos de tener un gobierno que nos acompañe, que esté ahí, que trabaje por todos, que nos vea a todos por igual. Por algo son elegidos, para trabajar por todos. Y siempre se dice que son servidores. ¿Cuántos no quisiéramos que sean servidores de todos? Pero en la realidad vemos que no siempre es así. A veces hay elegidos, hay grupos a los cuales se les atiende más. En los momentos difíciles es cuando deberían salir adelante para decir «aquí estamos, busquemos solución». El buen pastor o el buen gobernante es aquel también que escucha. ¿No? Que escucha. ¿Cuántas veces hemos escuchado esa frase? Que hay que gobernar escuchando al pueblo.
La Importancia de Escuchar al Pueblo
«¿Será que escuchan los gobernantes?»
En estos días, en este tiempo que vivimos, estamos mal, hay problemas, y se escucha a diferentes sectores que están dando sugerencias. La pregunta es: ¿Será que escuchamos o será que escuchan los gobernantes? ¿Será que son parte de eso de escuchar al otro para decir «por aquí podemos ir»? O solamente se encierran en sí mismos y dicen «esto es lo que queremos, esto es nuestro plan y no nos importa lo que dicen los demás». Aquí el buen pastor, un pastor también es un presidente que debería identificarse con ese buen pastor que da la vida, que busca soluciones, que busca la unidad.
Llamado a la Responsabilidad y Compromiso
«Ser buen pastor, no ser solamente un asalariado que trabaja porque le pagan.»
El Señor nos habla a todos ahora, a todas las autoridades eclesiales y civiles, a todos nos llama para que de verdad respondamos a esa responsabilidad que tenemos. Ser buen pastor, no ser solamente un asalariado que trabaja porque le pagan, que hace las cosas porque le pagan, y si no hay pago, no es mi responsabilidad. Que a lo mejor en momentos difíciles escapa. También eso no es de un buen pastor. No es el trabajo, no es la responsabilidad, no es de alguien que asuma una responsabilidad.
Unidad y Responsabilidad Nacional
«El Señor dice: ‘Tengo otras ovejas que no son de este redil, pero a ellas también tengo que llegar y tengo
que escuchar su voz, porque yo quiero un solo rebaño.'»
Por eso aquí lo que dice la lectura para analizarlo hoy. ¿No? Y analicemos todos los que tenemos responsabilidad. ¿Somos ese buen pastor que estamos ahí con el pueblo, que escuchamos al pueblo, que trabajamos con ellos y por ellos, trabajamos por todos para seguir avanzando? El Señor dice: «Tengo otras ovejas que no son de este redil, pero a ellas también tengo que llegar y tengo que escuchar su voz, porque yo quiero un solo rebaño». Y si hay un solo pastor, hay un solo rebaño. Eso debería ser nuestro país. Un solo rebaño, una sola nación, un solo país. Los ciudadanos somos parte de este país, ya sea en el Altiplano, en el oriente, donde sea que nos encontremos, todo esto es Bolivia y se debería ver de esa manera.
Riqueza y Corrupción: Un Desafío Nacional
» Si trabajaran de verdad todos y ganaran lo que les corresponde, nadie estaría en contra de eso”
Tenemos tantas oportunidades, tenemos riqueza en Bolivia, eso lo sabemos. Pero, ¿Qué se hace con la riqueza? ¿La sabemos explotar en bien de todos? Tenemos tantas oportunidades para poder salir adelante y no estar con los problemas cada vez, pero
no siempre se hace ese trabajo que corresponde. Tenemos tantas
cosas. Lo que no hemos tenido, a lo mejor, es tener suerte con nuestros gobernantes, que de verdad trabajen por el bien de todos, que sean responsables, sean honestos, luchen contra la corrupción. ¿Qué es lo que nos tiene sumidos en este problema? Por toda la corrupción que hay. Si de verdad, como dice Pablo, el que trabaja merece su salario. Si trabajaran de verdad todos y ganaran lo que les corresponde, nadie estaría en contra de eso. San Pablo dice que el que trabaja merece que le paguen. Pero uno que se saque así, robando, creo que esto es el problema que tenemos. ¿Cuándo lo vamos a vencer eso? ¿Cuándo vamos a ser honestos? Y parece que en eso no hemos tenido suerte hasta ahora. Esperemos que algún día podamos vencer esta lacra, este mal que está en medio de nosotros, que es ser honesto. Nos falta esa honestidad. Nos falta la sinceridad. Nos falta ser sinceros con nosotros mismos y no matar la esperanza de las personas.
Transformación y Renovación Personal
«Revístanse de una persona nueva. Dejen de lado todo aquello que han vivido hasta ahora: injusticia, corrupción, tantas cosas que podemos mencionar ahora.»
Creo que en esto no hemos tenido suerte hasta ahora y estamos esperando, seguimos esperando que algún día podamos lograr todo eso. Por eso, para luchar con todos estos problemas, con todas estas cosas que vivimos, también el Señor nos propone algo. Hemos escuchado la segunda lectura. ¿Qué nos dice Pablo? Revístanse de una persona nueva. Dejen de lado todo aquello que han vivido hasta ahora: injusticia, corrupción, tantas cosas que podemos mencionar ahora. Pablo dice: dejen de lado eso y revístanse de una persona nueva. Por lo tanto, hagan morir en ustedes todas las cosas terrenales como sea libertinaje, la pasión desordenada, malos deseos, amor al dinero que es una manera de servir a los ídolos. Eso nos propone Pablo hoy y eso es lo que nos dice Dios, y eso quisiera de nosotros. Que hagamos morir toda aquella cosa, ambiciones personales, libertinaje que solamente ayudan para algunos, tener ese amor tan desordenado y el amor al dinero. Tales cosas, dice Pablo, no quiere Dios de ustedes. Más bien, sigan por el camino correcto luchando por la vida. Pónganse pues entonces un vestido nuevo. Es decir, cambiando la manera de pensar tan negativa, tan mala, tan rencorosa, tan odiosa. Revístanse de
algo nuevo. Que se sientan que Dios les ha elegido para eso. Para que sean santos. Y para eso hay que practicar esto: ser compasivo. Uno con otro, tengan bondad, sean bondadosos, sean humildes, tengan paciencia.
Reflexión sobre la Compasión y la Unidad
«Si de verdad quieren empezar algo nuevo, sean
compasivos con otros, sean humildes, tengan
paciencia, sopórtense, perdónense unos a otros.»
No es solo cumplir un aniversario más y decirle al Señor ‘gracias, Señor’. Por lo que hemos hecho y perdón por las cosas que cometemos, perdón por tanta cosa que no nos ayuda a vivir como comunidad, como país, como personas, como ciudadanos que somos. Nos dice que para eso, si de verdad quieren empezar algo nuevo, sean compasivos con otros, sean humildes, tengan paciencia, sopórtense, perdónense unos a otros. ¿Será que está en nuestra mente o en la mente de algunas personas esto que nos dice Pablo? A veces no nos soportamos, no nos respetamos, no nos escuchamos unos con otros. Y eso no deja avanzar. Porque cada uno tira para su lado y no llegamos a nada, no nos respetamos, no nos amamos. Siempre estamos buscando culpables, es que el otro hizo esto, es que los demás no sé qué, y nunca avanzamos así. Si escucháramos al Señor lo que dice: tenga paciencia, sopórtese, perdónese. Oiga, ese perdón nos falta en este tiempo, ¿no? Queremos hundir al otro porque no piensa igual que yo o porque no es del mismo grupo donde yo estoy. El Señor nos creó así, de una manera cada uno somos un mundo diferente, cada uno tenemos otra manera de pensar, tenemos otra manera de ser, tenemos otra manera de hacer las cosas, pero eso no significa ser enemigos. ¿Por qué nosotros lo vemos así? Porque no piensa igual que yo, porque no es de mi grupo, ya lo tengo como enemigo y eso no nos deja avanzar. Eso no deja mirarnos, sentarnos para dialogar.
Rumbo a los Doscientos Años: Un Llamado a la Reconciliación
«No mirarnos mal entre unos y otros, que los del oriente son así, que los del occidente no sé qué.
Dejemos eso y lleguemos a los doscientos años reconciliados, amados por Dios y perdonados entre
nosotros «
Yo creo que esto que estamos rumbo a los doscientos años y se escucha mucho por ahí, no decimos estamos rumbo a esto, tenemos que hacer algo nuevo. Oiga, yo creo que necesitamos muchas cosas. Pero si de verdad avanzáramos en esto, del perdonarnos, de respetarnos, de amarnos, de dejar el racismo entre nosotros, de no mirarnos mal entre unos y otros, que los del oriente son así, que los del occidente no sé qué. Dejemos eso y lleguemos a los doscientos años reconciliados, amados por Dios y perdonados entre nosotros. Eso quisiera pensar, que de verdad lleguemos a los doscientos años no cometiendo los mismos errores de ahora. Y creo que es el sentir de todos y cada uno de los bolivianos, cada uno de ustedes. ¿O no es así? Creo que esto es lo que queremos, esto es lo que esperamos. La esperanza nunca se nos va a perder, pero depende de nosotros para que avancemos.
La Sabiduría y el Consejo Mutuo
«Que la palabra de Cristo habite en ustedes y esté siempre con ustedes.»
Que la palabra de Cristo habite en ustedes y esté siempre con ustedes. Que tengan sabiduría, dice Pablo, para que se puedan aconsejar unos a otros y se afirmen mutuamente como hermanos y hermanas que son. Oye, ¿será que podemos aconsejar a uno que no es de mi grupo? Difícil, ¿no? Difícil pero no imposible. Lo que nos presenta el Señor y lo que dice la Iglesia que a veces también no se la acepta o no se acepta lo que la Iglesia dice, que no se inventa cosas. Lo que la Iglesia dice, lo que el Señor nos dice, el Señor nos manda que hagamos, y esto es la palabra del Señor, no me estoy inventando yo cosas.
La realidad nacional a la Luz de la Palabra de Dios
«En nombre del Señor analicemos a la luz de la palabra de Dios, analicemos nuestra realidad.»
Por eso les decía, en nombre del Señor analicemos a la luz de la palabra de Dios, analicemos nuestra realidad. ¿Qué nos propone el Señor? Y esto es lo que nos propone: el perdón, el respeto, soportarse unos a otros, tener paciencia, buscar siempre algo mejor. Que la gracia ponga en sus corazones un cántico de Dios y todo lo que puedan decir o hacer, háganlo en nombre del Señor, dando gracias a Dios Padre por medio de Jesucristo. Es la palabra del Señor, es lo que nos dice hoy en esta fecha que estamos recordando. Y cuánto no quisiéramos escuchar hoy discursos no vacíos, no como dice la canción «¿De qué sirve cantar si las palabras de tu canto son vacías?» ¿De qué sirven tantos discursos si son discursos vacíos, promesas que no llenan la satisfacción de la gente? Hoy en día estamos en problemas y quisiéramos a lo mejor, ¿no?, escuchar algún discurso que nos ayude, que haya un compromiso de trabajar por mejorar la realidad que vivimos.
Orgullo Boliviano
«Nos sentimos orgullosos de ser bolivianos a pesar de los problemas y dificultades que tenemos.»
Le damos gracias a Dios porque somos bolivianos y nos sentimos orgullosos de ser bolivianos a pesar de los problemas y dificultades que tenemos. Pero no nos debemos sentir avergonzados por eso, más bien orgullosos de decir «soy boliviano». Y por esta Bolivia luchemos, por esta Bolivia trabajemos. Pongámonos en manos del Señor y que nosotros pongamos nuestro esfuerzo para poder trabajar.
Unidad, coherencia y Diálogo
«Qué lindo estar unidos, sentarse como estamos hoy: gobernación, comité cívico, alcaldía, todas las autoridades aquí presentes.»
Qué lindo estar unidos, sentarse como estamos hoy: gobernación, comité cívico, alcaldía, todas las autoridades aquí presentes. Qué lindo sentarnos así. ¿Será que en otro momento hay esa oportunidad de hacerlo? A veces los mismos grupos están divididos, se están peleando entre ellos. Pedimos unidad pero los mismos grupos están peleados. Si un grupo no puede mantener la unidad, ¿Cómo nos atrevemos a pedir unidad nacional? ¿Quién va a creer? Porque directamente vienen y no están pidiendo unidad
pero entre ellos están peleados. Y eso lo escuchamos y lo sabemos. Entonces, si nosotros no somos un grupo fuerte, es difícil pedir algo más, ¿no?
El Testimonio y la Unidad
«Seamos testimonio. Trabajemos por la unidad, trabajemos por el bien de todos, perdonémonos unos
a otros.»
Entonces, seamos testimonio, seamos testimonio. Trabajemos por la unidad, trabajemos por el bien de todos, perdonémonos unos a otros. Que salga de nuestro corazón todo ese odio que tenemos, que no nos sirve de nada. Tengan en cuenta las autoridades, el trabajo donde están ahora se acaba en unos años, ¿y después qué? ¿Qué de ustedes si no se ganan el cariño y el aprecio y el respeto de la gente hoy? Qué triste, ¿no?, escuchar después que se están escapando, que están en otro lado porque aquí no encuentran a alguien que les salude por lo menos. Qué triste esto, ¿no?
Aprovechar la Oportunidad
«Entonces, por lo tanto, aprovechen, autoridades nacionales, departamentales, aprovechen a trabajar
por todos para que de esa manera sean respetados, sean amados.»
Entonces, por lo tanto, aprovechen, autoridades nacionales, departamentales, aprovechen a trabajar por todos para que de esa manera sean respetados, sean amados. Creo que este es el mensaje que nos da el Señor hoy. Si lo entendemos y así trabajamos de esa manera, cuánto no quisiéramos que por semanas estemos sonriendo y no con cara triste, no con preocupación, sino alegres porque hemos avanzado, porque hemos trabajado, porque hemos solucionado todos los problemas. Qué lindo, ¿no?
Esperanza y Paz
«La esperanza está ahí y creo que todos esperamos que sea así.»
La esperanza está ahí y creo que todos esperamos que sea así. Que el Señor nos acompañe, que nos ayude, nos dé esa paz que tanto necesitamos. Que así sea.
Fuente: Alejandro Cossio