¿Por qué y cómo celebrar el mes de la Biblia?
Prensa CEB 28.08.24.- La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), a través de la Sección de Biblia del Área de Evangelización, invita a todos los fieles a participar activamente en la celebración del Mes de la Biblia. Este período, que se celebra durante todo el mes de septiembre, es una ocasión para estudiar, reflexionar y vivir la Palabra de Dios en nuestras comunidades, parroquias y hogares.
Propósito del Mes de la Biblia
El propósito central de este mes es dedicar un tiempo significativo a estudiar y celebrar las Escrituras, promoviendo una interacción bíblica dinámica y continúa a través de encuentros, reuniones y diversas actividades creativas. Así, se busca acercar a los fieles a la riqueza de la Palabra de Dios y su aplicación en la vida cotidiana.
Este año, el enfoque estará en el estudio del Libro del Apocalipsis, siguiendo las directrices del documento “Propuesta de Subsidio para la Formación Bíblica a Nivel Nacional”, aprobado por los Obispos de Bolivia en el año 2011.
Descarga el folleto guía aquí
Cómo celebrar el mes de la Biblia
Entronización de la Biblia:
El primer domingo de septiembre, se realiza la entronización solemne de la Biblia en las Jurisdicciones Eclesiales, parroquias y hogares, marcando el inicio de este tiempo de gracia. Esta ceremonia, presidida por el Obispo en cada jurisdicción, simboliza el reconocimiento del lugar privilegiado que la Palabra de Dios tiene en nuestras vidas.
Cinco Encuentros de Reflexión Bíblica:
A lo largo del mes, se llevarán a cabo cinco encuentros basados en el estudio del Apocalipsis, que se pueden profundizar con el folleto guía. Estos encuentros se centran en los siguientes temas:
- Alegría de pertenecer a Cristo (Ap 1,17-20).
- “Señor, ¿Qué quieres de mí?” (Ap 3, 20).
- El cántico de la creación y el grito de la tierra (Ap 5, 13-14).
- Comunidad en misión (Ap 12,1-2.5).
- Cielo nuevo y tierra nueva (Ap 3, 20).
Jornada Nacional de la Biblia:
El domingo 29 de septiembre se vivirá la Jornada Nacional de la Biblia, una celebración fervorosa con diversas actividades organizadas en las jurisdicciones eclesiásticas, parroquias, capillas, comunidades y familias. Esta jornada es el punto culminante del mes, donde se reafirman los compromisos adquiridos durante los encuentros y se celebra la riqueza de la Palabra de Dios.