Mons. Percy Galván insta a abrir los oídos del corazón y recuperar las relaciones humanas profundas
Prensa CEB 09.09.24.- En su homilía del 8 de septiembre, el Mons. Percy Galván, Arzobispo de la Arquidiócesis de La Paz, motivó a los fieles a abrir los oídos del corazón para tener relaciones más humanas.
En su reflexión sobre el Evangelio de Marcos (Mc 7, 31-37), en que Jesús, con gran humanidad, sana a un sordomudo, el arzobispo señaló que la manera en que Jesús utiliza incluso su saliva para tocar la lengua del hombre es sorprendente y destacó la intimidad del gesto y la fuerza de su poder sanador, que no solo liberó al hombre de su sordera y mudez, sino que también encierra un mensaje más amplio para todos, y consiste en la importancia de escuchar verdaderamente, no solo con los oídos, sino con el corazón.
La autoridad eclesial vinculó esta enseñanza con la figura de la Virgen María, cuya Natividad se celebra en diversas partes de Bolivia, como en Sucre en la advocación de la Virgen de Guadalupe, y en Chirca, en los Yungas de La Paz, en la advocación de la Virgen de la Natividad de Chirca. El Mons. Galván evocó su infancia, recordando cómo creció bajo la protección de la Virgen de Guadalupe, y compartió una conmovedora anécdota sobre su madre, quien consideraba que la mayor riqueza de María no eran sus joyas, sino haber sido la madre de Jesús.
El arzobispo enseñó que María es la anunciadora, discípula, evangelizadora, catequista, porque supo escuchar y anunciar a Jesús, hizo un llamado a seguir el ejemplo de María y a abrir nuestros oídos y corazones a Dios, a aprender a perdonar y a vivir con más fraternidad y cercanía: “Hoy más que nunca necesitamos relaciones humanas más profundas”, manifestó y lamentó que las interacciones se hayan vuelto superficiales en muchos casos, especialmente por la distracción de la tecnología, y reiteró el pedido de tener relaciones más humanas: “Tengamos hermosas y buenas relaciones humanas, así la vida va a tener más gusto, más sentido”, finalizó.