Presidente de la CEB cuestiona confiabilidad del Censo
Prensa CEB 01.09.24.- El Mons. Aurelio Pesoa Ribera OFM, obispo del Vicariato Apostólico del Beni y presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), se refirió a los resultados del Censo 2024: “Se nos ha dicho estos días los resultados de un Censo que seguramente muchos esperábamos después de 12 años, ¿es el más correcto? ¿Se puede confiar? ¿Se puede estar seguro de que aquello que se dice es la verdad? Creo que la respuesta la tenemos cada uno de nosotros sin necesidad de juzgar malintencionadamente”, expresó.
El obispo invitó a mirar los acontecimientos del mundo y del país, donde la falta de diálogo, la falta de sinceridad y la mentira, se han vuelto comunes, para, de esta manera, reconocer nuestra capacidad crítica que Dios nos ha dado y seguir la invitación que Jesús da en su Evangelio. El mismo consiste en recordar que “lo que contamina sale del corazón del ser humano”, y por ello, “la persona está llamada a amar a Dios y al prójimo con el corazón, no solamente con la boca o por los labios. Amar a Dios y al prójimo con el corazón es para dejarse transformar por el gran amor que Dios nos tiene”, reiteró el obispo.
En el marco de la celebración del Día del Peatón y el inicio del Mes de la Biblia, el Mons. Aurelio Pesoa reflexionó sobre el valor de la Palabra de Dios en la vida cotidiana, e instó a los fieles a no dejarla como algo distante o abstracto, sino a integrarla plenamente en sus vidas: “Que no quede como una palabra lejana, porque está ahí, a nuestro alcance, esa Palabra que es verdad y que es vida”.
El obispo también abordó el contexto medioambiental actual, refiriéndose a la contaminación y las prácticas destructivas como el chaqueo, que afectan a la ciudad y el campo: “El mundo se destruye, no porque Dios lo quiere, sino porque el ser humano, nosotros contribuimos a aquello”, dijo llamando a la responsabilidad de cada persona.
La autoridad eclesial pidió escuchar la Palabra de Dios para ponerla en práctica, vivirla y testimoniarla: “La Palabra de Dios que debe actuar, actuó y actuará en la historia y esa Palabra de Dios manifiesta la cercanía de ese Dios en quien creemos y en quien esperamos”, remarcó.