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Monseñor Huaygua Clausura la Asamblea Pastoral Diocesana: “Esperanza y Compromiso en Tiempos Difíciles”

Prensa CEB 28.11.2024.- Monseñor Juan Carlos Huaygua, Obispo de la Diócesis de Coroico, en la clausura de la Asamblea Pastoral Diocesana en su homilía hoy habló de temas de fe, compromiso y los desafíos actuales, tomando como referencia los textos litúrgicos del Apocalipsis y los Evangelios apocalípticos.

El Obispo destacó desde Espada – Sorata, el lenguaje simbólico del Apocalipsis, que, lejos de ser aterrador, busca fortalecer la esperanza, la alegría, la libertad y el compromiso. Invitó a los fieles a interpretar con gozo una realidad que, aunque difícil, siempre puede ser enfrentada con fe y unidad.

Refiriéndose a la simbología de Babilonia, Monseñor Huaygua la describió como un ícono de soberbia y maldad, representativa de los desafíos y conflictos de cada época. Comparó este simbolismo con las realidades contemporáneas, como las tensiones globales que ponen al mundo al borde de una posible Tercera Guerra Mundial y las crisis políticas, sociales y económicas que afectan al país.

“El mundo actual actualiza la Babilonia”, señaló, refiriéndose al egoísmo, la división y la falta de solidaridad que prevalecen en muchos sectores de la sociedad. En un llamado a la reflexión, criticó la «viveza criolla», que prioriza el beneficio personal sin importar el daño al prójimo, ejemplificando situaciones de especulación económica que perjudican a los más vulnerables.

En su homilía, Monseñor Huaygua, reafirmó el papel esencial de la Iglesia en la adoración a Dios y el servicio a la sociedad, “nuestra primera tarea es alabar a Dios. De esta alabanza debe brotar un amor que se traduzca en servicio”, enfatizó.

También recalcó, la importancia de la oración, tanto personal como comunitaria, como una herramienta fundamental para fortalecer el espíritu y guiar el actuar en medio de las adversidades. Instó a los sacerdotes y fieles a mantener una vida de oración constante y a traducir esa espiritualidad en acciones concretas que beneficien a la sociedad.

El obispo de Coroico, hizo un llamado a enfrentar las dificultades con alegría y confianza, recordando que Cristo es la libertad y fortaleza para los creyentes, «cuando estas cosas sucedan, levanten la cabeza, alégrense, se acerca su liberación”, dijo, citando el evangelio del día.

La Asamblea Pastoral Diocesana, que concluyó hoy, fue descrita como un espacio de diálogo fraterno y reflexión profunda sobre los desafíos de la Iglesia y la sociedad. Monseñor agradeció a los participantes por su dedicación y expresó su deseo de que esta experiencia fortalezca la fe, la esperanza y el testimonio cristiano en sus comunidades.

Con un mensaje de unidad, amor y compromiso, concluyó su homilía exhortando a los presentes a seguir luchando contra el mal con humildad y sencillez, sirviendo a Dios y al prójimo.

“Que sigamos siendo testigos de la alegría, fortalecidos en la esperanza y comprometidos con el anuncio del evangelio. Amén.”, finalizó.

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