Mons. Ricardo Centellas llama a la unidad y la esperanza en la Misa Te Deum por los 216 años del Primer Grito Libertario en Chuquisaca
Prensa CEB 26.05.2025. En el marco de los 216 años del Primer Grito Libertario en América, la Catedral Metropolitana de Sucre fue el espacio de la tradicional Misa Te Deum, presidida por Mons. Ricardo Centellas, arzobispo de la Arquidiócesis de Sucre. La celebración contó con la presencia de autoridades locales y fieles, así como la participación especial de Mons. Jesús Juárez, arzobispo emérito de Sucre.
Mons. Centellas, en su mensaje, resaltó la importancia de este aniversario para Sucre, Chuquisaca y Bolivia, recordando la alegría y el espíritu festivo que se vive en la ciudad durante estos días. “Celebrar el grito libertario para América es celebrar el anhelo inmortal de la libertad en la vida humana”, expresó el prelado, destacando el papel histórico de la capital en la lucha por la independencia y la presencia simbólica de la heroína Juana Azurduy de Padilla.
El arzobispo invitó a los presentes a dar gracias a Dios por ser parte de esta historia, pero también a renovar el compromiso de trabajar por la libertad. “Muchos varones y mujeres han entregado su vida para vivir en libertad. Eso es historia y es una referencia para nuestras vidas. Pero hoy tenemos que renovar este espíritu para que siga latente”, exhortó.
Esperanza ante los desafíos actuales
Mons. Centellas se refirió a la difícil coyuntura que atraviesa el país. “La situación económica, social y política en Bolivia no es nada fácil. ¿Quién se hubiese imaginado celebrar 200 años de Bolivia con una situación tan difícil?”, cuestionó, aludiendo a los problemas estructurales y cotidianos, como la escasez de combustibles, que afectan a la población.
Sin embargo, el arzobispo insistió en la necesidad de mirar el futuro con esperanza, inspirados en el lema del año jubilar de la Iglesia Universal: “Peregrinos de esperanza”. “El detenernos es de mediocres. Tenemos que avanzar y avanzar con esperanza”, manifestó, subrayando que solo en la verdad y la fraternidad se puede consolidar una sociedad más humana y unida.
El prelado también hizo un llamado a encontrar soluciones estructurales y urgentes a los problemas del país, pidiendo que la esperanza no se postergue hasta el cambio de gobierno. “Ojalá próxima semana. Renovemos con la bendición de Dios este espíritu, este grito de libertad que nos permite construir, no destruir”, enfatizó.
La homilía concluyó con una oración para que el pueblo boliviano pueda encontrarse como hermanos y construir alternativas que alivien el sufrimiento de las familias. “Estamos llamados a ver con espíritu positivo nuestra realidad. Todos tenemos que estar conscientes de que la podemos cambiar, pero con el concurso de todos; solo algunos será imposible. Que en esto Dios nos ayude, nos ilumine, nos fortalezca y acompañe en todo momento. Así sea”, finalizó Mons. Centellas.
Video gentileza: Televisión Universitaria – SUCRE
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