“Nuestra misión es defender la vida y la Casa Común”, delegación boliviana en el III Encuentro de la Red Eclesial Justicia y Paz en la Patria Grande
Prensa CEB 17.09.2025. Con el lema “Peregrinos de esperanza, construyendo el multilateralismo desde abajo”, se inauguró este martes 16 de septiembre el III Encuentro Presencial de la Red Eclesial Justicia y Paz en la Patria Grande, que se desarrollará hasta el 18 de septiembre en Lima.
El encuentro reúne a representantes de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Ecuador, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Perú, Paraguay y Venezuela, mientras que delegaciones de Haití, Nicaragua y Uruguay participan de manera virtual a través de Zoom.
Durante la primera jornada, los países presentaron informes sobre sus realidades y acciones pastorales. En el caso de Bolivia, la exposición estuvo a cargo de Manuela Urbina y Edmundo Condori, miembros de la Comisión de Justicia, Paz e Integridad de la Creación (JPIC) de la Conferencia Boliviana de Religiosos y Religiosas (CBR).
Vida religiosa al servicio de la esperanza y la sinodalidad
La CBR es la organización que agrupa a las congregaciones religiosas en Bolivia y tiene como misión “animar, iluminar y articular el ser y el hacer de la Vida Consagrada”. Su labor se articula a través de diversas comisiones, entre ellas comunicación, nuevas generaciones y justicia y paz.
En su presentación, Urbina y Condori destacaron que la Comisión JPIC nació como parte de una red eclesial latinoamericana para responder, en conjunto, a los desafíos sociales, ambientales y éticos del país. “Nuestra misión es defender la vida, los territorios, los derechos humanos y la Casa Común”, señalaron, inspirados en la espiritualidad de San Francisco de Asís y en la encíclica Laudato Si’ del Papa Francisco.
El equipo de Cochabamba ha impulsado un trabajo con fuerte dimensión espiritual y comunitaria. Sus integrantes provienen de diversas congregaciones y regiones del país, formando un espacio plural y comprometido.
Principales acciones de la Comisión JPIC
Entre las acciones que se desarrollan en Bolivia, se mencionaron: Trabajo en red: colaboración con el Movimiento Franciscano Justicia y Paz, Justicia y Paz SVD, JPIC Dominicos, Repam, Movimiento Laudato Si’ Bolivia, Radio Pío XII, Regchag, y organizaciones jesuitas, entre otras.
Proyectos de reforestación y huertos comunitarios: enfocados en el cuidado de la tierra y la soberanía alimentaria en comunidades como Potreros y Vinto. Peregrinaciones simbólicas: especialmente en el Día Mundial del Agua, realizando caminatas de oración y denuncia en ríos y lagunas afectadas por la contaminación. Eventos eclesiales: organización de la Semana Laudato Si’ y el Tiempo de la Creación.
Articulación internacional: vínculos con Cáritas Internacional, RUN-Bolivia, Vivat Internacional y la ONU en temas de derechos humanos y justicia ecológica. Formación y acompañamiento: talleres para comunidades religiosas, regionales y fundaciones, así como visitas de acompañamiento a las regionales de la CBR. Acción pública: pronunciamientos ante leyes o hechos que afectan la protección de los derechos humanos y la Casa Común. Presencia mediática: participación en programas de radio, entrevistas y foros como el Foro Social Panamazónico (FOSPA).
Bolivia y sus compromisos climáticos
En el informe, también se analizó el cumplimiento de los Compromisos Nacionalmente Determinados (CND) del Estado Plurinacional de Bolivia en materia de agua y bosques, ejes vinculados directamente con la Amazonía.
En el sector agua, se destacó la meta de alcanzar 12 millones de hectáreas con Manejo Integral de Cuencas (MIC) para 2030. Esto abarca cuencas clave como el Iténez, Mamoré, Beni y Madre de Dios. También se busca aprobar 51 instrumentos de planificación para la gestión de cuencas priorizadas y conservar 16 millones de hectáreas de humedales Ramsar, como el Río Yata, Río Matos y Río Blanco.
En cuanto a bosques, Bolivia se propone: Reducir en 80% la deforestación respecto a la línea base para 2030; eliminar la deforestación en áreas protegidas nacionales; reducir en 60% la superficie afectada por incendios forestales; duplicar las áreas bajo manejo integral y sustentable de bosques; recuperar un millón de hectáreas de cobertura boscosa; y duplicar la producción de productos forestales no maderables como castaña, asaí y cacao.
Las metas en riesgo
La comisión advirtió limitaciones. “Sin cambios en el modelo de desarrollo, estas metas corren el riesgo de quedar solo en el papel”, indicaron, señalando la falta de diagnóstico sobre minería, agroindustria y deforestación, así como la alta dependencia de financiamiento externo.
Además, denunciaron que las políticas de expansión agropecuaria y los incendios forestales amenazan la conservación efectiva de la Amazonía. “La contradicción con políticas que expanden el agronegocio hace que difícilmente se logre conservar efectivamente los bosques amazónicos”, subrayaron.
El encuentro continuará hasta el jueves 18 de septiembre, con espacios de diálogo y reflexión sobre la justicia social, la paz y la protección de la Casa Común en la región.
En su intervención, la delegación boliviana reiteró su compromiso de seguir trabajando en red. “Nuestra labor es un servicio a la vida y un llamado a la conversión ecológica”, concluyeron.
Fuente: ADN CELAM