“Que el Señor les dé la paz, les bendiga y les proteja”, Mons. Galeote a los peregrinos de seis jurisdicciones que llegaron hasta los pies de la Virgen de Chaguaya
Prensa CEB 3.09.2025. Cerca de 290 peregrinos procedentes de las diócesis de Potosí, Cochabamba, Santa Cruz, Ñuflo de Chávez, San Ignacio de Velasco y la anfitriona Tarija participaron de la peregrinación “Peregrinos de Esperanza” rumbo al Santuario de la Virgen de Chaguaya, en un encuentro fraterno y espiritual organizado por la Comisión de Hermandad de la Conferencia Episcopal Boliviana.
La ceremonia de clausura contó con la celebración de la Eucaristía presidida por Mons. Jesús Galeote, obispo del Vicariato Apostólico de Camiri, quien estuvo acompañado por Mons. Jorge Saldías, obispo de Tarija. Mons. Galeote expresó su reconocimiento por la acogida brindada por la Diócesis de Tarija y destacó la importancia de la hermandad que une a las diócesis bolivianas con las de Alemania, una relación que ya cumple 65 años.
Durante su mensaje, el obispo enfatizó el sentido profundo del Año Jubilar proclamado por el Papa Francisco, invitando a todos los presentes a ser instrumentos de paz y luz en medio de los desafíos actuales. Recordó que el lema “La esperanza no defrauda” es una invitación a fortalecer la fe, la unidad y el compromiso social, especialmente en una peregrinación que representa no solo un acto de devoción, sino un compromiso colectivo.
El encuentro fue también ocasión para remarcar la riqueza de la diversidad regional y cultural de Bolivia, donde cada jurisdicción tiene sus propias advocaciones marianas y tradiciones, convergiendo hoy en Tarija bajo el manto protector de la Virgen de Chaguaya. Mons. Galeote destacó la historicidad común y la cooperación que se vive en esta gran hermandad episcopal, y animó a todos a continuar con la misión evangelizadora desde la esperanza y el amor.
La peregrinación, mostró la gran devoción a la Virgen de Chaguaya, que atrae anualmente a miles de fieles comprometidos con la fe. Esta celebración también contó con la participación activa de la comunidad local y voluntarios que garantizaron la organización, seguridad y bienestar de los peregrinos.
