Mons. Galván insta a comprometerse a servir y colaborar con la ciudad, el barrio y la comunidad
Prensa CEB 16.07.2023.- En el Aniversario de La Paz, este 16 de julio, el arzobispo de la Arquidiócesis de La Paz, Mons. Percy Galván, envía un mensaje de felicitación y reflexión a todos los habitantes de esta tierra maravillosa. En sus palabras, invita a celebrar este cumpleaños con alegría y agradecimiento, recordando la importancia de la paz en nuestras vidas.
A la luz del manto luminoso de nuestra madre, la Virgen del Carmen, el arzobispo, haciendo referencia al Evangelio de las bodas de Caná, recordó que el vino es símbolo de alegría. Así como en la fiesta de bodas falta alegría si falta vino, en nuestra fe también necesitamos a Cristo para encontrar la verdadera felicidad.
El arzobispo animó a que, como paceños, trabajen en busca de la felicidad, “no solo humana, de la fiesta de las bodas, sino también en esa alegría espiritual”. De manera ilustrativa, mostrando una torta de cartulina, presentó bloque a bloque aquello que como regalo especial puede ser ofrecido a la ciudad de La Paz.
El regalo de la Escucha
El primer regalo que el Mons. Galván propone ofrecer a La Paz es el don de la escucha. Tomando el ejemplo de la Virgen María, nos invita a abrir nuestros oídos para escuchar la Palabra de Dios y su voluntad, obedeciendo sus mandatos.
“Que cada uno de nosotros responda positivamente a esas palabras del Señor. El Señor quiere que nos hagamos parte de su proyecto, parte de su Iglesia, parte de este trabajo que conduce a la salvación. El Señor quiere que seamos protagonistas de la familia, nuestra Iglesia Católica”, señaló.
Aseguró que la falta de escucha a Dios puede generar violencia, división y confrontación, y animó a ser protagonistas del proyecto de salvación.
La virtud del Servicio
El segundo regalo que el arzobispo mencionó es el servicio, inspirado en la Virgen María, quien se dedicó a cuidar y servir a su prima Isabel. El Mons. Galván instó a comprometerse a servir y colaborar con la ciudad, barrio, institución y comunidad.
“Un servicio Católico es amoroso, es gratuito, es apasionado”, aseguró a tiempo de invitar a reflexionar sobre cómo podemos brindar un servicio genuino y desinteresado en nuestras vidas diarias.
Mostrar la autenticidad de ser cristiano
El arzobispo de La Paz invitó a reflexionar sobre el papel de la Virgen María en nuestra fe y cómo podemos vivir como auténticos cristianos en medio de los desafíos actuales. Lamentó que cada vez existan menos vocaciones sacerdotales y religiosas.
El Mons. Galván exhortó a asumir esta hermosa tarea de mostrar a los más jóvenes el camino hacia Dios: “Si amamos a nuestros hijos, si amamos a nuestros nietos, si amamos a los niños, mostrémosles el camino del Señor”.
“Vamos al mundo entero a mostrar a los demás a Jesús, el único que puede multiplicar el vino, el único que puede darnos la verdadera paz y la verdadera alegría, Jesucristo Nuestro Señor”, sostuvo la autoridad eclesial.
Dolor y sufrimiento en la vida cristiana
Presentando el cuarto bloque del pastel, el Mons. Galván abordó el sufrimiento y el dolor en la vida cristiana y aseguró que, como Católicos, no debemos temer ni evitar el sufrimiento, ya que está intrínsecamente ligado a nuestra naturaleza humana.
El arzobispo invitó a mirar el ejemplo de Cristo en la Cruz y a unir nuestros sufrimientos a la Cruz salvífica, ofreciéndolos por nuestra propia salvación y por las personas que amamos, “que nuestro sufrimiento y nuestro dolor sea ofrecido al Señor, para que los nuestros y nosotros mismos alcancemos la salvación”, remarcó.
Actitud orante de María
Por último, el Mons. Percy Galván, reitero que la Virgen del Carmen, madre de la Iglesia, con su actitud orante y su conexión profunda con Jesucristo, nos enseña a vivir nuestra fe con valentía y entrega, a pesar de los sufrimientos que enfrentamos.
Al concluir la celebración, el arzobispo alentó a ser instrumentos del Señor y dar gracias a Dios en oración.
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