Arzobispo de Sucre, «para perdonar y amar no hay que pensarlo dos veces”
Prensa CEB 21.1.2024.- Mons. Ricardo Centellas, Arzobispo de la Arquidiócesis de Sucre, afirma que el camino del discipulado no requiere postergación, “es inmediato”, haciendo alusión al Evangelio de san Marcos en donde Jesús les dijo: “Síganme, Yo les haré pescadores de hombres”.
Desde la Catedral Metropolitana de Sucre el también vicepresidente de la Conferencia Episcopal Boliviana, Mons. Ricardo Centellas, basó su homilía en torno al Evangelio de san Marcos (1,14-20), e hizo énfasis al llamado que hace Jesús a sus discípulos, “pero lo interesante es la respuesta de ellos (los discípulos)”, quienes inmediatamente lo dejaron todo y lo siguieron», rememoró Mons. Centellas.
“Y esta es la característica del discipulado, del seguidor de Jesús, el que comienza a caminar con Jesús”, acotó.
Explica además, que el discipulado no es para medir “ a ver cómo me va”, y hacer cálculos en la vida, “sino ir inmediatamente con Jesús dejando todo, al igual que los discípulos que lo siguieron”.
Puntualiza que esa es la característica del discipulado de Jesús, “cambia inmediatamente de parecer para seguir a Jesús, dejaron la barca y comenzaron a caminar con Jesús”, señaló.
“Esto indica a los discípulos misioneros de Jesús, es decir, a nosotros los bautizados que el Señor nos llama hacer parte del reino de Dios. Él nos llama para entrar a este camino de comunidad, de fraternidad, de solidaridad, y para esto dice, “no hay que pensar dos veces”, reitera Mons. Centellas.
El obispo de Sucre, exhortó a los feligreses que para perdonar no hay que pensarlo dos veces, ya que luego será más difícil, “porque Jesús nos invita a vivir perdonando”, y añade que es lo mismo para amar, es decir, que también no se debe pensar demasiado, “hay que apostar a una vida de amor, que es una vida de fraternidad y solidaridad”.
“Pedir a Dios que nos bendiga en esta dinámica de vivir, caminando con Jesús, pero avanzar con él no hay que pensar mucho, es una apuesta, así como la fe que es una actitud de confiar, y esa confianza va creciendo a medida que pasa el tiempo”, recomendó.
“El camino de discipulado, el caminar con Jesús no requiere postergaciones, es inmediato”, finalizó la autoridad eclesial.
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