Nuncio en Bolivia Fermín Emilio Sosa pide a los indígenas de la Amazonía no perder su identidad que los hace únicos, hombre, naturaleza y espíritu
Prensa CEB 22.3.2024.- El Nuncio en Bolivia, Mons. Fermín Emilio Sosa en un encuentro fraternal con los indígenas de la Amazonia del Beni, en su visita realizada al Vicariato de Reyes les pidió “nunca” perder su identidad, que los hace “únicos” hombre, naturaleza y espíritu, por más que tengan que emigrar a otras tierras.
“Es un gusto compartir con ustedes estos momentos fraternos y traerles el saludo y bendiciones del Papa Francisco, quien les tiene un profundo respeto. Esta es la primera vez que estoy en la Amazonia y me encuentro admirado de tanta belleza, el Papa ama la Amazonia por eso le dedicó un Sínodo solamente para reflexionar sobre su futuro, un futuro que pareciera incierto, pero trabajando juntos se puede preservar el gran legado amazónico”
“El Papa Francisco ha querido expresar esta relación entre Dios, el hombre y la naturaleza, en la exhortación Apostólica mi Querida Amazonia, en cuatro grandes sueños, el sueño social, el sueño cultural, el sueño ecológico y el sueño eclesial…Cuatro dimensiones en un solo sueño para que promuevan todos los habitantes el buen vivir. De ahí nace de que todos los cristianos debemos cuidar la casa común”, compartió.
Recomendó que por ser una biosfera muy rica, es importante cuidarla. “Este cuidado debe venir primero desde ustedes… Esos ríos que cruzan por estas zonas son la vida de los bosques, y de todos ustedes, les da alimento regando sus aguas, a todas las zonas boscosas que al mismo tiempo dan fruto. Si los descuidamos y los contaminamos, entonces nosotros mismos nos hacemos daño”.
“Ustedes tienen un elemento muy importante que muchas culturas han perdido, la unión entre el ser humano y la naturaleza. Estas relaciones humanas están impregnadas por la naturaleza circundante, porque ustedes lo sienten y lo perciben como una realidad que integra su sociedad y cultura, como una prolongación de su cuerpo personal, familiar y grupal”.
“No pierdan su identidad, aun cuando tengan que emigrar por fuentes de trabajo, la identidad es lo que nos identifica, lo que nos hace únicos, cuando la perdemos, nos perdemos asimismo. Ustedes tienen una gran riqueza que puede ser compartida con los demás, sobre todo en aquellas culturas, en las que la unión hombre-naturaleza, hombre-espíritu están desapareciendo y solo aparece el hombre consumista, para poder llegar a la felicidad”, reflexionó.
“Ustedes tienen la riqueza de la felicidad enraizada en el Dios creador. No la pierdan, sino que en Cristo busquen siempre a ese Padre celestial, que vela por sus hijos. No pierdan tampoco su relación con la madre de Jesús, quien es nuestra madre. Ella conoce bien nuestra condición y ella va rogar a su Hijo para que nunca nos haga falta su bendición, como María hacia Jesús”, concluyó.