Mons. Percy Galván en la Misa Crismal de la Arquidiócesis de La Paz: “Nosotros no somos protagonistas, es Dios Padre que hace de nosotros instrumentos del anuncio gozoso de su Palabra”
Prensa CEB 17.04.2025. En la solemne Misa Crismal celebrada en la Catedral Nuestra Señora de La Paz, el Arzobispo Mons. Percy Galván presidió la Eucaristía que reunió a sacerdotes de toda la arquidiócesis para bendecir los santos óleos y renovar sus promesas sacerdotales. En su homilía, Mons. Galván dirigió su mensaje centrado en el perdón, la reconciliación y el testimonio del sacerdocio como servicio al pueblo de Dios.
Fuente video: Arquidiócesis Nuestra Señora de La Paz
Mons. Galván inició su reflexión agradeciendo a los sacerdotes por su servicio en la arquidiócesis y los animó a reencontrar el entusiasmo por su vocación, citando al Papa Francisco: “Solo nos toca animarles para que nos reencantemos con nuestro sacerdocio y podamos testificar lo que Dios nos ha mandado”.
El arzobispo hizo un llamado a los sacerdotes para que primero se perdonen a sí mismos, superando la autocrítica y el rencor, luego se perdonen entre ellos, fortaleciendo la unidad en la familia presbiteral, y finalmente extiendan ese perdón a los fieles, acompañándolos en el camino de la reconciliación y la misericordia. Destacó que la unidad presbiteral es un regalo que deben ofrecer a la patria, especialmente en un contexto social y político marcado por tensiones y divisiones.
Invitó a los sacerdotes a ser testigos del paraíso y la vida eterna mediante la alegría y la fidelidad a los votos de castidad y pobreza, rechazando las tentaciones del materialismo y el egoísmo. Subrayó que la verdadera riqueza del sacerdote es Cristo y que deben ser hombres libres, obedientes a Dios y no a intereses materiales o políticos.


El Arzobispo también recordó que el sacerdocio no es protagonismo humano, sino un servicio confiado al Espíritu Santo, que actúa a través de ellos en la consolación, la celebración de los sacramentos y la evangelización. “Somos simples instrumentos de Dios”, afirmó, invitando a los sacerdotes a mantener la humildad y la dependencia total en el Espíritu.
Finalmente, Mons. Galván resaltó el papel fundamental de la Virgen María en el sacerdocio, señalando que sin la presencia materna y femenina de María, el ministerio pastoral estaría incompleto. Invitó a los sacerdotes a acudir a ella para recibir consuelo y a reflejar en su servicio pastoral las cualidades maternas de amor y cuidado.

La Misa Crismal de la Arquidiócesis de La Paz, enmarcada en la Semana Santa 2025, fue un momento de profunda renovación espiritual y compromiso para los sacerdotes, quienes renovaron su entrega al servicio de la comunidad eclesial bajo el llamado a la reconciliación, el perdón y la unidad, valores esenciales para la misión pastoral que viven los presbíteros.





