¿Quién dice la gente que soy yo? Monseñor Aurelio Pesoa, Obispo del Vicaríato Apostólico del Beni hace una Invitación a la Fe Viva y Comprometida.
Monseñor Aurelio llama a renovar el compromiso cristiano: “El que no vive para servir, no sirve para vivir”
Monseñor Aurelio invitó a la comunidad a reflexionar sobre la verdadera dimensión de la fe cristiana, inspirándose en el Evangelio de Lucas. El pasaje, que recoge la pregunta de Jesús a sus discípulos “¿Quién dice la gente que soy yo?”, sirvió como punto de partida para un llamado a la renovación personal y comunitaria del compromiso con Cristo.
Monseñor Aurelio destacó que la fe no puede quedarse en lo meramente espiritual o en la recitación del credo, sino que debe traducirse en testimonio de vida, actitudes y comportamientos concretos. “No basta con decir ‘soy cristiano’ o ‘soy católico’, y mucho menos ‘soy católico pero no practicante’. El verdadero cristiano es aquel que sigue a Jesús con acciones concretas y efectivas”.
Monseñor recordó que el compromiso cristiano implica generosidad, amor al prójimo, perdón, caridad y compasión, pero, sobre todo, una disponibilidad absoluta para el servicio. “El éxito de la vida no está en la riqueza o el poder, sino en la entrega generosa al prójimo y en el servicio desinteresado”, afirmó, subrayando que la grandeza se mide por la capacidad de servir a los demás.
En un contexto marcado por la campaña electoral, Monseñor Aurelio hizo un llamado especial a los candidatos y líderes políticos: “Ojalá los candidatos a gobernar nuestro país se dieran el tiempo de acercarse a la palabra de Dios y descubrir el verdadero compromiso de servir.
Finalmente, concluyó su mensaje invitando a la comunidad a comenzar de nuevo en el servicio y la entrega: “Comencemos, hermanos, a servir al Señor en los hermanos que hasta ahora poco o nada hemos avanzado.
Una Invitación a la Acción
Seguir a Jesús exige acciones concretas y efectivas. No basta con buenas intenciones; la fe debe traducirse en obras. Cargar la cruz es estar dispuestos a pagar el precio de la fidelidad y la entrega, tarea que dura toda la vida.





