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Iglesia de Bolivia celebra la Semana de la Familia: “Compartiendo la alegría del amor familiar”

Prensa CEB 08.05.2023.- Del 8 al 14 de mayo, la sección de Pastoral Familiar del Área de Comunión Eclesial en la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), lleva adelante distintas actividades para celebrar en comunión la Semana de la Familia con el lema: “Compartiendo la alegría del amor familiar”.

Del 8 al 12 de mayo se tiene prevista la realización de encuentros virtuales por la plataforma Teams y será transmitido por la página de Facebook: Pastoral Familiar Bolivia- Oficial.

Además, se realizará la Fiesta de la Familia, con una celebración eucarística el 14 de mayo a las 11:00 am en la Catedral de Collpani de la Diócesis de El Alto.

“La mejor manera de proteger a la familia, es con la educación y el ejemplo, haciendo visible el amor que es centro y fuerza para superar cualquier problema”, afirma un comunicado de la Pastoral Familiar, compartido por María Beysabel Espinoza Verastegui, colaboradora responsable de la Sección de Pastoral Familia de la CEB:

Semana de la familia

Pastoral Familiar

Cada 15 de mayo se festeja oficialmente el día Internacional de la Familia. Dicho evento fue sugerido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el 20 de septiembre de 1993. La finalidad es reconocer la importancia de las familias para la sociedad en general.

“Compartiendo la alegría del amor familiar

Este año en Bolivia, la celebración de la familia está marcada por una gran preocupación en el bienestar de las familias. La situación esta delicada, queremos abrir los ojos, darnos cuenta de la realidad que vive cada miembro de la familia, nos cuesta como sociedad y como Iglesia, porque “echarse de menos” nos compromete al cambio y a la acción.

El presente y futuro de las familias se pinta más triste, porque los intereses personales y económicos quieren callar las verdaderas necesidades de la familia. Los valores humanos y cristianos son reemplazados por valores egoístas y de intereses contrarios al evangelio. En ellas quienes son más vulnerables y sufren las consecuencias de la indiferencia son ancianos, mujeres y niños, tanto así que no debería ser normal ver el rostro de niños, hombres y mujeres, jóvenes y ancianos sufriendo injusticias, violencia y muerte.

Todo lo que se haga por mejorar la situación de la familia es válido, hace falta un compromiso radical y concreto en defensa de la vida y la defensa de los más débiles.

Para eso deben acabarse las manipulaciones de los medios de comunicación que en su mayoría no son imparciales, porque están mostrando los valores materiales como supremos por sobre los valores humanos, las redes sociales continúan desuniendo familias y son factores de riesgo, las coimas y manipulación en instituciones que debieran proteger al inocente, dejan que triunfe la injusticia y no por último, la indiferencia de la sociedad normaliza la discriminación, la violencia y el sufrimiento.

La familia está en riesgo y debemos protegerla, no solo de ideologías sino también, del ausentismo de padres y madres en nuestros hogares.

Las instituciones estatales, religiosas y plataformas ciudadanas que defienden la familia debiéramos entrar en sintonía para lograr verdaderas y concretas mejoras en la situación económica, social, educativa y práctica de valores humanos para tener al menos una visión optimista del futuro para nuestros hijos.

Si reconocemos que la familia es la “célula de la sociedad”, es la “Iglesia doméstica”, el espacio donde idealmente nacen los afectos más sinceros y honestos, tendríamos que cuidar mejor de cómo se forman las familias, el nivel de conciencia entre varón y mujer en la responsabilidad que asumen al formar una familia. Nuestra tarea es acompañarlas en la situación en la que esté, donde estén y como esté.

Frente a este panorama la Pastoral Familiar, está actuando en los espacios donde hay alcance, procuramos fortalecer los lazos familiares, trabajamos en la prevención, porque creemos que niños que experimentan día a día la búsqueda de los padres por educarse y educar a sus hijos con valores, serán padres y madres de familia en el futuro que enriquecerán a la sociedad en la que convivan.

Insistimos en este compromiso personal de cada uno y cada una por mejorar la situación de la familia en todo aspecto. Si cada uno busca el bien común, evitaremos más dolor y sufrimiento. Tenemos testimonio de parejas y familias que logran salir adelante en medio de toda esta realidad, afianzados en el dialogo y respeto mutuo, en el amor de esposos y con los hijos. Además con la certeza inquebrantable de que Dios está presente y nos acompaña.

En ese afán, resaltando esta semana, invitamos a acompañar este caminar en bien de la familia en los encuentros de dialogo y formación, el 8 a 12 de mayo de manera virtual:

  • Plataforma MICROSOFT TEAMS
  • FACEBOOK: Pastoral Familiar Bolivia- Oficial.

Además en la celebración eucarística, FIESTA DE LA FAMILIA en El Alto, el 14 de mayo a las 11:00 am en la Catedral de Collpani.

La mejor manera de proteger a la familia es con la educación y el ejemplo, haciendo visible el amor que es centro y fuerza para superar cualquier problema.

¡Por algo Dios quiso venir al mundo en una familia!

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