“La misión que yo tengo es traer la presencia del Santo Padre ante los fieles, ante la Iglesia y colaborar también con el gobierno”, dijo el flamante Nuncio Apostólico en Bolivia
Prensa CEB 16.01.2024.- Al compás de bandolinas, acordeón y guitarras, el coro de hermanas de la parroquia de Achacachi recibió cantando el “Caminar como Profetas” al flamante Nuncio Apostólico para Bolivia, Mons. Fermín Emilio Sosa Rodríguez , “la misión que yo tengo es traer la presencia del Santo Padre ante los fieles, ante la Iglesia y colaborar también con el gobierno, tratar de tener esa comunión y trabajar juntos por el bien del pueblo y por el bien de la nación y su desarrollo”, manifestó a su llegada al país, el representante del Papa en Bolivia.
A continuación el audio del coro de la parroquia de Achacachi quienes cantan, «Caminar como Profetas» que en aimara es, «PROFETANAKJAMAW SARAÑ WAKISI»
Al promediar las 17:20 de la tarde de ayer, una comitiva de obispos, entre los que se encontraban, el arzobispo de la Arquidiócesis de La Paz, Mons. Percy Galván, el obispo de la ciudad de El Alto, Mons. Giovani Arana y Secretario General de la CEB, los monseñores; Luis Durán, Basilio Mamani, obispos Auxiliares de La Paz, Mons. Pascual Limachi, obispo de la Prelatura de Corocoro, Mons. Juan Carlos Huaygua, obispo de la Diócesis de Coroico, personal ejecutivo de la Conferencia Episcopal Boliviana, sacerdotes y religiosas, además del Pueblo de Dios, recibieron con júbilo la llegada de su Excelencia Reverendísima, Mons. Fermín Sosa Rodríguez, al Aeropuerto Internacional de El Alto.
El salón rojo fue el escenario principal de tan emotivo recibimiento. A su ingreso Mons. Sosa fue recibido por el coro de mujeres de pollera de la parroquia de Achacachi quienes con su tradicional tono quechua-aimara cantaron “Caminar como Profetas”, dando así el marco musical y la bienvenida al representante diplomático.
En su recorrido, y antes de llegar a la testera principal del salón, el Nuncio Apostólico, fue vestido con un poncho rojo (que es la indumentaria que llevan los hombres del municipio de Achacachi), un sombrero negro, chalinas de alpaca y una linda corona de guirnaldas, los cuales fueron recibidos por monseñor Sosa, con mucho cariño y admiración.
“Es un gusto venir a trabajar con mis hermanos obispos, ciertamente es una nueva experiencia es una realidad diferente que tuve en mi anterior nunciatura que era Nueva Guinea y las Islas Salomón”, dijo.
Mons. Sosa manifestó también que escuchó hablar mucho del país y que considera un honor que el Papa Francisco lo haya designado como representante en esta tierra, “trataré de hacer lo mejor posible mi misión, y cómo decía, la misión que yo tengo es traer la presencia del Santo Padre ante los fieles, ante la Iglesia y colaborar también con el gobierno, tratar de tener esa comunión y trabajar juntos por el bien del pueblo y por el bien de la nación y su desarrollo”, indicó.
“Estamos aquí como pastores para ayudar al desarrollo de los pueblos a los cuales se nos ha confiado”.
Ya en la testera, Mons. Percy Galván, se dirigió al representante diplomático indicando: ¡Bienvenido Excelencia, siéntase como en su casa!, “a través de su persona, de su servicio, de su ministerio, nos vamos a sentir muy unidos al Santo Padre Francisco, a quien lo tenemos en nuestro corazón”, dijo el arzobispo de La Paz.
Posteriormente, el obispo de la ciudad de El Alto, Mons. Giovani Arana y también Secretario General de la CEB, tomó la palabra a nombre de la Conferencia Episcopal Boliviana señalando que el cariño de la gente es así, cálida y sincera, “y cuando usted visite las jurisdicciones la va a sentir, así que, ¡bienvenido! y siéntase en su casa, como serán las 18 casas que usted visitará en las 18 jurisdicciones”, expresó.
Nuevamente tomó la palabra el Nuncio Apostólico en Bolivia, agradeciendo el recibimiento, “vengo aquí como misionero, trayendo esa comunión del santo Padre”, además reveló que el Papa Francisco tiene un cariño para Bolivia, “ese amor que él me ha manifestado antes de venir y me dijo, por favor lleva ese cariño y ese amor que tengo a ese pueblo boliviano”.
Lo importante, dice, es vivir en comunión con el Santo Padre, con sus obispos y con sus ovejas, “, es el signo de las ovejas que me han entregado, porque es el signo del pastor con sus ovejas y las ovejas con su pastor”.
“No solamente es una dirección, sino son las dos direcciones de ida y vuelta, trabajando en comunión, trabajando juntos, porque nuestra tarea es ir caminando como Iglesia a la Casa del Padre Celestial, esa es nuestra tarea y vamos caminando juntos, unidos de la mano, no adelante, no atrás, sino juntos”, recalcó Mons. Sosa.
Remarcó que el Santo Padre le solicitó explícitamente esto, es decir, trabajar juntos y caminar juntos “para que la presencia de Dios se haga presente en el pueblo boliviano y gracias de corazón por esta acogida, por este momento, me siento halagado, me siento horrado”, reiteró.
“El Santo Padre lo dijo, que no seamos nuncio de oficina, sino que también vayamos al encuentro de la gente, al encuentro de los obispos, al encuentro de los fieles, visitando la Diócesis, y yo espero la invitación de los obispos para visitar todas las jurisdicciones eclesiásticas aquí en Bolivia”, puntualizó.
Ya finalizando su discurso dijo, “Dios bendiga a cada uno de ustedes a sus familias y bendiga al pueblo boliviano”.
Antes de desalojar el ambiente, Mons. Fermín Sosa, sorprendió con una solicitud, “por favor primero quiero una foto con los que me recibieron cantando” es decir, con los hombres, mujeres y niños que componen el coro de la parroquia de Achacachi, pedido que generó muchos aplausos entre los asistentes.
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